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Con el periodo electoral que se vive en Estados Unidos y el posible triunfo del demócrata Joe Biden, algunos expertos han analizado el impacto que este hecho tendría y señalan que la industria automotriz podría salir beneficiada, aunque bajo ciertas reservas.

A diferencia de Donald Trump, que durante su mandato generó un clima de incertidumbre y caos debido a acciones como la amenaza de un arancel de 35% a los autos importados desde México y la guerra comercial con China, Biden podría impulsar la producción de vehículos eléctricos y tener una política exterior más cordial, aunque por otra parte se podría generar un ambiente más estricto en el cumplimiento de la ley laboral mexicana.

De acuerdo con datos publicados por Expansión, el candidato demócrata se comprometió durante su campaña a invertir miles de millones de dólares para agregar 500,000 estaciones de carga eléctrica, financiar la investigación de baterías y restaurar la deducibilidad fiscal de 7,500 dólares para vehículos eléctricos que ya había expirado.

Incluso algunas automotrices como General Motors y Fiat se han comprometido a trabajar de la mano con su administración para crear un futuro eléctrico, libre de emisiones y más seguro para sus empleados, clientes y para la sociedad.

Por otro lado, expertos también señalan que su triunfo podría ser perjudicial para la industria automotriz nacional, pues de mejorar la relación comercial que Estados Unidos tiene con China, la manufactura mexicana se vería en riesgo y se podrían venir abajo inversiones de este país para instalarse en territorio azteca.